El 18 de abril de 2011, inicia sus actividades la Casa Ludovica recibiendo a niños con sus madres para atención ambulatoria (diagnóstico y/o tratamiento), que viven lejos y no cuentan con recursos económicos ni cobertura social para sostener su alojamiento en la ciudad.

Su principal objetivo es brindar un ámbito propicio para atender la salud durante la etapa ambulatoria complementaria a la internación. La casa cuenta con 30 habitaciones con baño privado, 4 de ellas para niños con capacidades diferentes, una amplia cocina, salón de usos múltiples asignado cotidianamente a comedor y sala de juegos para los chiquitos, oficina de recepción y espacio para visitas, patio interno, parque con juegos, terraza y sala de lavado y planchado.

Es preocupación de la Fundación brindar sustentabilidad a este proyecto; para tal fin se ha contado, además del producto obtenido por el trabajo genuino que realizamos, con la colaboración de empresas y personas de la comunidad que han solventado -y en varios casos continúan haciéndolo-, gastos de servicios o aportado bienes e insumos que contribuyen al confort y funcionamiento de la Casa. La creciente demanda de alojamiento requiere que se fortalezcan los aportes para mantener su ocupación a pleno. Los pacientes y sus madres reciben en la Casa todos los elementos para higiene personal y de sus pertenencias, además se les provee toda la vajilla y se les brindan las cuatro comidas principales; de las cuales, el desayuno y la merienda, son preparados por las mamás con productos suministrados por la Fundación. El almuerzo y la cena son provistos por el Hospital de Niños.