Por estos días, el Hospital de Niños estará inaugurando tres quirófanos más. La obra, prevista en tres etapas, permitió poner en funcionamiento los primeros tres quirófanos a principios de este año. Y supone la conclusión de las tareas en el mes de junio del próximo año, cuando los nueve quirófanos hayan sido renovados completamente.
“Cerca del 40 por ciento de los pacientes que ingresan al hospital requieren algún procedimiento que justifica que entren al quirófano”, explicó Jorge Molina (MP 110195), cirujano y jefe del servicio de quirófano. El especialista agregó que no solo son cirugías, sino que a veces se realizan endoscopías u otros procedimientos que no son quirúrgicos, pero que requieren la entrada al quirófano.
Los nuevos quirófanos cuentan con todas las normativas de seguridad: el piso es conductivo para evitar accidentes con la electricidad estática; las paredes (que alcanzan hasta el cielorraso en línea curva) cuentan con un revestimiento que resiste todos los químicos conocidos que se usan en los quirófanos; el aire es tratado con tres niveles de filtro y un aparato controla la presión, para garantizar que esté libre de partículas; los transformadores de aislación evitan accidentes eléctricos y las baterías UPS garantizan la continuidad de la energía.
Además, ahora el sector cuenta con una sala de recuperación para que los niños despierten después de recibir anestesia, equipada con gases medicinales, monitores, luces, enchufes y todo lo correspondiente a una sala de terapia intermedia. Esto permite acelerar los tiempos de quirófano y realizar una mayor cantidad de procedimientos.